Para que un cordero aprenda a hablar
debe comeeer mermelada,
debe bebeeerse un veeelero
y debe comer veeentanas
con veletas y con béicon.
Debe vestirse la meeente
con merluzas de la meeesa,
un melón americano,
con la Metro Goldwyn Méeeyer,
con vestigios de begonias
y con un hipermercado;
meeerendar veinte vestidos
y decirte: «¡Veeeeete!» al médico.